El desayuno fue realmente estupendo, con una variedad de productos locales que hicieron la experiencia muy especial.

Aunque la habitación era amplia, me pareció un poco oscura debido a la ventana pequeña que tenía, lo que restó algo de luz natural.

El ambiente familiar y la atención personalizada le dan un encanto especial. Disfruté de la conexión con la naturaleza mientras observaba las grullas en los alrededores. El dueño mostró mucho cuidado en los detalles.

me sentí muy seguro, no tengo ninguna queja

1 Desayuno delicioso
2 Atención excepcional
3 Encanto histórico

1 Habitación oscura
2 Patio con moscas

La habitación era tan oscura, que casi necesitaba una linterna para encontrar mis cosas. El desayuno en el patio era una experiencia helada, ¡qué desilusión! Y para colmo, esperaba un regalo de bienvenida o al menos un upgrade por la incomodidad, pero claro, eso es mucho pedir aquí. Casi escribo una reseña positiva, pero, simplemente no pude.

Reseña justa

Un lugar encantador con atención excepcional. Las habitaciones son generosas y acogedoras, ideales para descansar después de un día de senderismo. El desayuno variado con productos locales es un must. Álvaro, el dueño, se asegura de que te sientas como en casa, incluso facilitando estancia adicional en su cortijo cercano cuando se ocupó. Un detalle muy apreciado.

Estilo arquitectónico único, conexión con la fauna local, decoración creativa y original

La habitación un poco oscura, un poco más de luz natural sería ideal!!! El patio podría estar más cuidado, sentir la falta de atención en ese detalle es decepcionante!!!

La atención del dueño fue extraordinaria, incluso dejó un aire acondicionado portátil en nuestra habitación. Sin embargo, la habitación era un poco oscura con su ventana pequeña. Disfrutamos de un desayuno delicioso con productos locales, ideal para recargar energía antes de explorar rutas de senderismo.

Recomendado para gente que busca tranquilidad

Al llegar, el dueño fue super atento, incluso nos ayudó a registrar las identificaciones y nos mostró la habitación, además dejó un aire acondicionado portátil porque estaba en proceso de instalar unidades en cada habitación. La noche, subimos al balcón y vimos las estrellas y la luna, fue mágico, nos trataron como familia.

No fue barato, pero aceptable por la experiencia entregada.

Un lugar encantador con mucha historia

La estancia fue muy agradable. Las habitaciones eran grandes y acogedoras, y el desayuno, con productos locales, era variado y delicioso. El entorno es ideal para hacer rutas de senderismo y explorar localidades cercanas como Jerez de los Caballeros. Solo me gustaría que se pudiera cuidar mejor el patio, ya que había algunas moscas que podían ser molestas.

Amplias habitaciones y camas cómodas.

El hotel tiene un encanto especial, con su historia sobre las grullas, y el dueño mostró un genuino cuidado por los detalles. Disfrutamos del desayuno continental mientras conversábamos animadamente con el personal cercano.

Más iluminación natural en la habitación sería ideal.

la atención fue excelente y el desayuno muy variado y delicioso. la habitación tenía un aire acondicionado portátil, pero podía ser mejor iluminada.

El hotel tiene encanto, con un ambiente familiar y un desayuno delicioso con productos locales. La atención de Álvaro fue destacable, siempre preocupado por nuestra comodidad. Sin embargo, la habitación tenía una ventana pequeña, lo que la hacía un poco oscura.

La habitación era amplia y acogedora, además de tener una cama comodísima que me hizo dormir genial. La calefacción funcionaba muy bien, lo cual fue un plus. me gustó que hay un aire acondicionado portátil en la habitación porque estaban en proceso de instalar unidades fijas. El balcón del hotel es ideal para mirar las estrellas por la noche, fue mágico. La única pega es que la ventana podría ser un poco más grande para dejar entrar más luz natural.

La habitación tenía una ventana pequeña y con persiana bajada, lo que la hacía bastante oscura, así que si buscas luz natural, podría ser un inconveniente. El desayuno se sirve en un patio que puede resultar frío según la temporada, lo que le falta algo de calidez.